domingo, 23 de febrero de 2014

La Fuente de los Deseos

¿Cuántas veces hemos ido a otras ciudades y hemos tirado una moneda en una de esas fuentes típicas que, según dicen, cumplen nuestros deseos? Es algo que todos hemos hecho en algunos de nuestros viajes. Caso aparte es que se cumplan o no lo que hayamos pedido.

Fuente de los Deseos, jardines del Muelle.


En Huelva, como acostumbra a pasar, no tenemos costumbre de hacer este ritual, y no será (como muchos pueden pensar) porqué no hay lugares para hacerlo. Todos conocemos los Jardines del Muelle (oficialmente Parque 12 de Octubre) o como casi todo el mundo le llama sentimentalmente Parque de las Palomas, aunque cada vez sean menos las que van quedando. Tres nombres para un mismo lugar. La fuente central redonda, con sus chorros de agua, se encuentra en la parte central y habita en los jardines desde sus inicios en 1935 que es cuando se inauguró por vez primera dicho parque. Es la fuente que paseantes y turistas se encuentran cuando pasean por los jardines, pero muchas menos personas conocen otra pequeña fuente, ubicada en un rincón tranquilo y sosegado que invita a sentarse y deterse a escuchar como cae el agua ininterrumpidamente. Se trata de una pequeña fuente tallada en piedra y que cuenta con tres pisos en los que el agua va deslizándose hasta caer en el estanque en el que reposa.
Fuente central, datada en 1935.

En 1968, cuando se procedió a una remodelación y ampliación de los Jardines del Muelle, se hablaba de esta fuente en un artículo del diario local Odiel Información y que decía que se había convertido en la "Fuente de los Deseos" ya que muchas parejas jóvenes echaban allí monedas para pedir el deseo de amor eterno. Aún, a día de hoy, sigue habiendo gente que conoce este rincón romántico pues alguna moneda puede verse bajo el agua.




Fuente en los Jardines de la Cinta
Existe, además, otra fuente de mayor tamaño y también realizada en piedra maciza en la que también es digna no solo de visitar sino de pedir un deseo lanzando una moneda. Se encuentra en un lugar con muchísimo encanto, cargado de espiritualidad y retirado del mundanal ruido, en los Jardines de la Cinta, junto al santuario del mismo nombre y que, por las monedas que pude ver en su base, puede arrebatarle el título de "Fuente de los Deseos" de Huelva. Yo, por si acaso, tiré dos monedas -una por fuente-, ya os contaré si mis deseos se ven cumplidos.


martes, 11 de febrero de 2014

El hotel que nunca existió

En los años siguientes a la Guerra Civil, en plena dictadura franquista, la ciudad de Huelva se encontraba en una situación deprimente, carente de grandes infraestructuras, incluida la hotelera. Escasos eran los alojamientos existentes (hoy día seguimos padeciendolo) y los que había eran de tipo familiar y de reducido tamaño. Atrás quedó el suntuoso y lujoso Gran Hotel Colón, uno de los mejores del país cuando se construyó, y que fue transformado para oficinas de la Rio Tinto Company.

Obras paradas del Gobierno Civil
El centro histórico de Huelva estaba formado por una amalgama de calles estrechas y desordenadas. Por ello se decidió crear una gran avenida que dignificara el centro de la ciudad, y de paso ensalzar la arquitectura del régimen. El ayuntamiento existente hasta la fecha se había quedado muy pequeño (se encontraba donde existe actualmente el Pasaje Antonio Machado, en la calle Puerto) y había planes para la construcción de un nuevo edificio más grande y capaz para una la ciudad. Se aprobó entonces la creación de la "Gran Vía de Huelva", una avenida ancha que uniría la Plaza del Punto con la neurálgica Plaza de las Monjas y en la que se establecerían los organismos oficiales tales como el nuevo Ayuntamiento, la Diputación de Huelva, las oficinas de Hacienda y la Subdelegación de Gobierno.

Proyecto de la fachada
Para ser exactos, la Subdelegación de Gobierno fue un intruso en los planes inciales. Lo que realmente había contemplado en su lugar era el "Gran Hotel Tartessos", un establecimiento de titularidad municipal que vendría a suplir la deficiencia hotelera en la ciudad y que estaría ubicado en un lugar de lujo. Se comenzó su construcción en torno a 1943 llegando a estar las obras avanzadas del mismo y quedando paradas en 1945. Por diversas razones, el ayuntamiento de la época desistió de su construcción y vendió el edificio al estado para la instalación del Gobierno Civil en él. En 1947 se redacta el proyecto de reforma y finalización de obras, siendo en 1954 cuando quedan completamente acabadas. Hay que destacar que los arcos fueron acabados antes que el resto del edificio, como se puede observar en la imagen, por lo tanto datan de 1944-1945 aproximadamente.
Subdelegación actualmente

 El diseño finalmente de la fachada dista un poco del proyecto original, como suele ocurrir en muchas ocasiones, siendo el resultante más sencillo que lo proyectado. En la actualidad el edificio consta de tres plantas, al igual que los edificios colindantes y una fachada simétrica en la que destaca el escudo de la Nación en la parte central, presidiendo el único balcón, así como las columnas colocadas a pares, sumando un total de 8, situadas en los arcos en los que descansa la balconada.